El filial madridista dirigido por la leyenda Raúl González Blanco protagoniza un señor encuentro ante un Recreativo de Huelva que vive en la orilla de la victoria a domicilio.
Real Madrid Castilla y Recreativo de Huelva se enfrentarían en esta apasionante Primera Federación para protagonizar un duelo con el objetivo de afianzarse hacia la permanencia en duelo de poder a poder. El conjunto blanco por su parte, llegaba al partido situado en la zona de descenso de la tabla clasificatoria y con el aliciente de ser el grupo más goleador del campeonato con los nombres propios de Victor Muñoz y el ariete Gonzalo García. Éstos, por su parte, tendrían su tarde haciendo diabluras en el sector rival. Por otro lado, el combinado de Abel Gómez aterrizaba en la capital española en una dinámica ascendente y con la historia a su favor. Múltiples recuerdos de victorias recreativistas permanecen en la memoria de los onubenses. Para seguir viviendo entre recuerdos memorables, el Decano debía golpear a domicilio en el feudo madridista, cosa que no adquiere desde el comienzo de competición. Tras el desarrollo del encuentro, la sequía de puntos fuera del Colombino y las malas actuaciones lejos de él, siguen perdurando.
Gonzalo García, protagonista como goleador y capitán en el encuentro.
Este chico pide sitio
Con 13 dianas y repetidas actuaciones con las que despierta el interés futbolístico de la multitud, Gonzalo García volvió a disfrutar del fútbol en el Alfredo Di Stéfano. El máximo artillero de toda la Primera federación, hereda el dorsal de la leyenda Raúl González y muestra honor hacia la oportunidad de picar en la mesa del primer equipo. El delantero español se mostró acertado y decisivo para el Real Madrid Castilla ante una línea defensiva recreativista que contaba con la figura de viejos roqueros como Raúl Navas. Además, no bailó solo. Conformado junto con Victor Muñoz en la delantera blanca, ambos buscaron las cosquillas de la zaga defensiva y las dos anotaciones locales llevaron sus firmas. Por otro lado, ante las ausencias en la zona defensiva del plantel de Carlo Ancelotti, el técnico italiano ha decidido que ambos viajen en la expedición de la primera plantilla para formar parte de la convocatoria que viajarán a Qatar para la disputa de la Final de la Copa Intercontinental de este próximo miércoles.
Con respecto al partido, ambos conjuntos arrancaron con propuestas futbolísticas parejas, aunque con distintas armas, la afición que acudió al Alfredo Di Stéfano vibró con dos combinados que insistieron en el juego ofensivo y en la creencia de salir victoriosos. Nico Njalla y David Soto pusieron el vértigo y la electricidad necesaria para un Recreativo nutrido de calidad técnica por dentro y capacidad para dominar en tres cuartos de campo. Raúl González plasmó sobre el tapete un planteamiento de organización en bloque bajo para aprovechar los errores de la sala de máquinas del equipo onubense y salir en transición con sus hombres de ataque. Salió el plan y consigo, la brillantez madridista.
En el ecuador del primer asalto, la profundidad por el costado derecho del campo fue protagonista y, con música y certeza, se proyectó un balón colgado al área a Gonzalo. Un salto prodigioso y la capacidad de ser poderoso en el juego aéreo, condicionantes para firmar el primer gol del choque. Golpe de realidad para un Recreativo de Huelva que debía armarse arriba y propiciar las primeras internadas en campo rival. Así fue, y de lleno. Se juntaron los magos y la mejora del juego aumentó, se confeccionó el grupo y el dominio en campo rival fue una realidad. Los espacios en los costados permitieron las proyecciones de los extremos y ahí, dónde puede hacer daño el abuelo, existe sangre. Viajó el cuero hacía las inmediaciones madridistas con la presencia de Rubén Serrano, quien creció en los últimos metros y derrochó su poderío físico para poner las tablas en el electrónico. El canterano, la garra del Recreativo. Nada cambió tras los goles y el 1-1 se desarrolló hasta el final de la primera mitad y ambos conjuntos se marcharon a vestuarios.
Rubén Serrano, zaguero del Recreativo, anotaba el empate del duelo.
Ya en la segunda mitad, los hombres de González fueron los más participativos en el juego y los encargados de dirigir el mismo a través de sus cualidades. El filial merengue salió al rectángulo de juego con las ideas claras y con un paso adelante en intensidad y capacidad física que el Recreativo de Huelva no supo igualar. Condicionantes trascendentales para una superioridad que se mostró reflejada en los segundos 45 minutos, de tal manera la proyección de los jóvenes talentos fueron efectivas a través de la pegada de Victor Muñoz. La línea de presión instalada en campo rival del Recreativo, propició un juego directo por parte de los de Raúl debido a la multitud de espacios sin solidarse que facilitaba la defensa onubense. Genialidad de control orientado de Gonzalo García para desplegar su fútbol en conducción sumado a una majestuosa asistencia para situar a Muñoz, de forma certera, ante Rubén Gálvez. Golpeo seco y con maldad hacía el segundo palo del marco rival para anotar una ejecución que inclinaría hasta el cierre, una balanza a favor del Real Madrid. Con nada que perder y con pólvora en el banquillo, Abel Gómez creyó en sus balas para una agónica remontada que no tuvo lugar en esta jornada. Victoria de peso para los intereses madridistas que apaga la buena dinámica decana y que agranda la brecha del Recreativo a domicilio.