El porvenir de Carlo Ancelotti ha cambiado radicalmente en las horas recientes respecto a su vinculación con Brasil. El técnico italiano se encuentra ahora muy próximo a abandonar el pacto que ya había firmado con la Federación Brasileña para dirigir a la ‘canarinha’.
Ancelotti y Brasil, una relación que parece imposible
De acuerdo con reportajes de la prensa de Brasil, las discrepancias habrían emergido tanto en el aspecto financiero (el técnico aspira a los diez millones netos por temporada que obtiene en el Madrid) como en la fecha de asumir la dirección del equipo (Ancelotti planea asumir en agosto y no a comienzos de junio). En Brasil, prácticamente dan por perdido a Ancelotti ya que comprenden que es complicado recuperar la situación a pesar de que los puentes continúan abiertos.
Se ha discutido sobre el interés de Brasil por contratar a Carlo Ancelotti desde hace varios meses. Desde 2019, la Canarinha no ha conseguido ganar ningún título, lo que genera inquietud en la Confederación Brasileña de Fútbol, dado que parece que Argentina ha conseguido el dominio en el fútbol americano. Uno de los elementos fundamentales en la reconstrucción de un gran Brasil, parecía ser Carlo Ancelotti, no solo por su amplia experiencia, sino también por su conocimiento profundo de Vinicius. La gran estrella carioca actual, pero que con la selección no tiene nada que ver con el jugador del Real Madrid.

El Real Madrid no se cerraba ante la salida del entrenador. Ya que tiene la intención de dar paso a un perfil renovado, en el que destaca con fuerza Xabi Alonso. Sin embargo, no contempla permitir que Ancelotti se marche del Real Madrid a las puertas del Mundial de Clubes. En el que el conjunto merengue se juega una millonada.
Otras ofertas
También fuentes del club merengue han indicado que la negociación ha sido obstaculizada por una sólida propuesta financiera que el entrenador ha obtenido de Arabia. Está rondaría los 50 millones por temporada.
Además, se menciona en la prensa de Brasil que Ancelotti habría solicitado al Madrid un pago de cuatro millones por la terminación del año de contrato que le resta.