El Real Madrid cayó en el fuera de juego culé y el Barça le ha destrozado a la espalda. El equipo azulgrana ha noqueado al equipo merengue. El equipo de Hansi Flick tenía que confirmar, tras la victoria contra el Bayern, que este equipo era candidato a ganarlo todo. Tras una exhibición en el ataque en la segunda parte, el tridente culé ha dejado sin palabras al tridente madridista que ha caído en las garras de la defensa del Barça y de la idea de Hansi Flick.
Una primera parte en la que parecía que los de Ancelotti habían salido mejor y un Madrid que se pudo adelantar en bastantes ocasiones. Pero, la clave fue ese fuera de juego, ese fuera de lugar, ese offside, ese reglamento maldito en el que van a soñar tanto Kylian Mbappé como Vincius, el Madrid en general. Faltaron pocos minutos para que el Barça reaccionara y tuviera algunas ocasiones que hicieron peligrar la portería de Lunin. Pero el Barça, en esta primera parte, no estaba haciendo su mejor partido en ataque, en mi opinión, por falta de ideas ante un Madrid muy bien ordenado. Los ataques del equipo blanco seguían llegando y los aficionados del Barça sufrían «microinfartos» cada vez que un jugador se quedaba solo ante Iñaki, en fuera de juego.
Seguramente los aficionados culés pedían el cambio de Fermín y la entrada de Dani Olmo. Aunque el alemán Flick ha sorprendido con la entrada de Frenkie de Jong, que más tarde ha dado la razón a quienes lo han criticado. El holandés le ha dado más calma al equipo y ha liberado más a Pedri para que jugara más como mediapunta, posición que después ocupó el mismo Dani Olmo.
No llevábamos ni 10 minutos de 2º tiempo y un pase espectacular de Marc Casadó le daba en bandeja el gol de Robert Lewandowski que seguramente definió más lejos de lo normal. Era en este momento cuando el Madrid empezaba a tirar de coraje para remontar el partido, pero no. Alejandro Balde centró hacía que el polaco para que hiciera fácil un remate de cabeza. Ahora sí, con Modric ya en el campo, el Real Madrid cambió y tiró de un juego mucho más ofensivo, dejando la defensa descuidada. En el Barça también había hecho cambios, Dani Olmo. El equipo culé tuvo un par de combinaciones donde Robert Lewandowski pudo poner el hat-trick y la sentencia. Pero no, tuvo que esperar el Barça y que Lamine tras una transición rápida pusiera el tercero con un golazo con la derecha. Ahí sí el Madrid se fue a la desesperada a encontrar el gol. Y en esos momentos donde ya parece que tanto un equipo quiere guardar el resultado o como el rival ya no quiere más daño, Íñigo Martínez buscó la espalda de la defensa para que Raphinha marcara con una vaselina impresionante el cuarto y último del partido.
Cuando Xavi entrenaba al FC Barcelona costaba saber a qué jugaba el equipo y qué idea tenía. Sobretodo, muchas veces los jugadores estaban perdidos. Con la llegada de Hansi Flick, el alemán ha venido con su idea y seguramente no la soltará. Y lo mejor, que todos los jugadores creen y confían en esta misma.
Barça 30 puntos. Real Madrid 24 puntos. 6 puntos de diferencia tiene el Barça sobre el Real Madrid, donde los primeros han dado un golpe sobre la mesa a la liga sin tener que confiarse, ya que quedan 27 partidos y seguramente veremos un final de liga más que emocionante.