Tras amarrar la salvación este pasado fin de semana, muchas incógnitas rodean al Real Zaragoza.
Se acabó el sufrimiento, se terminó rondar el precipicio, el Real Zaragoza ha logrado certificar la permanencia a falta de una jornada, silenciando a los más críticos y tirando de garra e historia para sellar la permanencia. No ha sido nada fácil, una temporada que comenzó cargada de ilusiones para los maños, se ha ido convirtiendo poco a poco en un calvario que, solo la irregularidad del Eldense y el ostracismo de campaña de los otros tres descendidos, no ha agravado más de la cuenta.
Lesiones, múltiples entrenadores, criticas a la directiva… y hasta la destitución del director deportivo, todo eso ha tenido que vivir el aficionado maño en esta 24-25. A falta del trámite del próximo viernes en Castellón, todas las miradas se centran en cómo va a afrontar el club su decimotercera temporada consecutiva en la categoría de plata.

Decía Gabi en rueda de prensa, tras la victoria ante el Deportivo de La Coruña, que hablaría con la directiva, y si le convencía el proyecto, su amor por el club se vería respaldado con una buena base para continuar a los mandos. Los números le avalan: llegó a un Zaragoza muerto física, futbolística y emocionalmente, y con su templanza y pasión, logró transmitir al grupo un mensaje que se ha traducido en forma de resultados: 15 de 30 puntos posibles, invicto en La Romareda, y un sprint final de 3 victorias en los últimos 4 encuentros ensalzan el buen hacer del madrileño. Sin embargo, la escasa propuesta futbolística, sumada al sufrimiento de cada punto logrado, alimenta el pensamiento de sus detractores, los cuales solo ven al ex-capitán como un comodín, y no como el buque insignia del futuro.
Seguido del míster, se ciernen muchos interrogantes en torno a la confección de la plantilla del año que viene: hasta 8 jugadores finalizan contrato o cesión. Entre ellos, el hondureño Kervin Arriaga, por el cual la propiedad ya se ha puesto manos a la obra para cerrar su fichaje. Se habla de una cifra cercana a los 400.000 euros, un montante considerado barato en el círculo aragonés, por el pilar fundamental del equipo en esta segunda vuelta, tras su llegada en invierno cedido del Partizán de Belgrado. Otros jugadores importantes que finalizan contrato son el capitán Lluis Lopez, el central Jair Amador, que ha ido de menos a más, y el centrocampista Toni Moya, cuya continuidad no está tan clara. Si nos enfocamos en el resto de la plantilla, el club podría tratar de buscarle salida a nombres como Sinan Bakis, Joan Femenías o Ager Aketxe, además de que tanto Iván Calero como Adrián Liso podrían tener encaminadas, según varios medios, sus llegadas a Espanyol y Getafe respectivamente. Todas estas salidas serían claves para tratar de efectuar una revolución de la plantilla, completamente necesaria viendo los resultados obtenidos.

Toda esta «summerania» carecerá de sentido sin la llegada de un nuevo DD. La destitución de Juan Carlos Cordero este último marzo, ha dejado vacante un puesto de máxima prioridad siempre para los equipos. Varios perfiles han salido a la palestra: desde la larga experiencia en un club como la de Txema Indias en el Leganés, donde confeccionó el ascenso a primera, pasando por la variada trayectoria de Felipe Miñambres, que ha hecho lo mismo con el Levante, hasta la juventud de un Juanfran Torres, respaldado por las sinergias del Zaragoza con el Club Atlético de Madrid.
Elección del entrenador, planificación del plantel, variantes en la dirección deportiva… sumados a la entrañable despedida del Estadio de la Romareda durante dos temporadas, para mudarse a un estadio modular, nos llevan a la gran pregunta: ¿Y ahora, qué?