Marruecos se proclamó campeón del mundo sub-20 el pasado 20 de octubre tras superar a la selección argentina por 2-0. Esta final deparó un choque entre las dos favoritas para levantar el título hacia el cielo chileno, y fueron los africanos los que consiguieron derrotar a Argentina, la selección más favorita para tocar la gloria. En tierra chilena, además, se mostró una gran adversidad a la victoria albiceleste, y el estadio de la final tiñó de rojo sus gradas para apoyar al combinado africano.
El partido inició igualado, con ocasiones para los dos lados que ninguno materializaba hasta el minuto 12, cuando Yassir Zabiri puso una falta desde la frontal del área en la escuadra, adelantando así al conjunto marroquí. Unos minutos después, en el minuto 29, la estrella marroquí remataría de volea un centro al fondo de las mallas, lo que supondría el 2-0 definitivo que daba la victoria a Marruecos.

Tras el doblete de Zabiri, Argentina se vio en una situación en la que nunca se había visto en todo el torneo, pues nunca se había visto por detrás en el marcador, y eran los primeros goles que recibían en toda la fase eliminatoria. Ante esta nueva situación, los sudamericanos se vieron sin ideas para remontar el partido, precipitándose en pases y decisiones en los últimos tramos del campo, mientras que Marruecos supo dominar a la perfección el tiempo y el marcador defendiendo y saliendo al contraataque.
Gianluca Prestianni fue el que se echó el equipo a la espalda e intentó cambiar el rumbo de la final, pero una selección argentina con Maher Carrizo y Alejo Sarco, sus estrellas atacantes junto a Prestianni, desacertados no consiguió anotar ni siquiera el primer gol que les haría creer en la remontada. Con el resultado del descanso se llegó al final del encuentro, y Marruecos se proclamaba campeón del mundo sub-20 por primera vez en su historia, demostrando que la selección absoluta tiene un futuro prometedor. Por su parte, Argentina se quedó a las puertas de conquistar su séptimo mundial sub-20.
En cuanto a los galardones individuales, Othame Maamma, asistente en el segundo gol de la final, fue elegido mejor jugador del torneo, y Yassir Zabiri y Milton Delgado, balón de plata y balón de bronce respectivamente. Zabiri, además se hizo con la bota de oro del torneo tras anotar un doblete en la final y llegar a los 5 goles, provocando así un cuádruple empate con Benjamin Cremaschi, Lucas Michal y Néiser Villarreal, quienes también anotaron cinco goles durante el torneo. Santino Barbi, guardameta argentino, fue elegido como mejor portero del torneo, pues llegó a la final habiendo recibido tan solo dos goles en contra en la fase de grupos.

